Varapalo al esquí por Navidad
Asturias
Profesionales del sector calculan pérdidas de hasta 40.000 euros por la falta de nieve en el primer periodo clave de esta actividad. El retraso de las nevadas mantiene congelados empleos en las estaciones invernales y en negocios de la zona
07 Jan 2019. Actualizado a las 20:18 h.
No han sido unas Navidades blancas. Y eso pasa factura. Muchos negocios y profesionales del esquí dependen de la nieve en Asturias. Si se retrasa, no hay ingresos y todo resta. Es temporal y se concentra en unos meses. Por eso, empezar a sumar cuanto antes es fundamental. Navidades, junto con Carnaval y Semana Santa, son fechas claves para las estaciones de esquí y para los negocios que dependen de ello. Este año no hubo suerte, pese a que las nevadas tempranas animaron a muchos pensar lo contrario. ¿El resultado? Pérdidas de miles de euros. Las Escuelas de Esquí de Fuentes de Invierno y Valgrande-Pajares calculan que han dejado de ingresar en torno a 40.000 euros. Un dato al que hay que sumar las cancelaciones y la falta de reservas en los hoteles y los empleos que dependen directamente de este sector (profesores de esquí y personal de las estaciones).
Ambas estaciones han tenido que cancelar sus cursillos de esquí: Navidades y Reyes que ya dan por perdidos (tampoco pudieron llevar adelante el del Puente de la Inmaculada), y se han visto obligados a retrasar actividades que estaban previstas en diciembre y durante las primeras semanas de enero (‘Bautismo de nieve’ para niños, ‘Cursillos de dos fines de semana’ y Semana Blanca). «Son fechas importantes. Recibimos mucha gente de Galicia, Madrid, Castilla y León y el norte de Portugal que además pernocta en los alojamientos cercanos. La ocupación ha sido muy modesta, en torno al 20% cuando, si hubiera habido nieve, estaría completo», explica Armando Valdés, director de la Escuela de Fuentes de Invierno y presidente de la Asociación turística ‘Aller Experiencias’. Aunque confiesa que entre los que acumulan más experiencia en el sector, ya se han acostumbrado a que la falta de nieve retrase la apertura de las estaciones, confía en que se cumpla la previsión de nevadas que anuncian para los próximos días. «Iniciábamos un cursillo el fin de semana de 11 y 12 de enero que ya lo hemos pospuesto», explica. De momento, han dejado de ingresar en torno a 40.000 euros a los que, aclara, hay que deducir gastos fijos y el coste del personal.
Detrás de los negocios hay muchas personas que viven pendientes del tiempo para iniciar su actividad. A la espera de que lleguen nevadas está el personal de refuerzo de los hoteles, también de los alquileres y venta de material, la plantilla fija de profesores, el personal de la estación y los profesionales que prestan el servicio médico a pie de pista. «En Fuentes de Invierno hablamos de hasta un centenar de personas con el personal eventual», señala Armando Valdés. Pese a que el arranque no ha sido esperado, saben que aún es pronto para valorar la temporada. Confían en que tras las nevadas les sigan muchos días de buen tiempo. «La climatología es primordial. Con un fin de semana de buen tiempo, la gente se anima a venir y a esquiar».
La mejora de los accesos al Puerto de San Isidro
También apuestan por abril, este año, a diferencia de la temporada pasada, la Semana Santa es tardía y eso juega a favor. «Nos encontramos con que hay temporadas con más nieve que en diciembre, los días son más largos, el tiempo acompaña y el estado del puerto favorece», explica el director de la Escuela de Fuentes. La mejora y el acondicionamiento del puerto San Isidro es una vieja demanda del sector. Tras las intensas nevadas de la temporada pasada que mantuvieron cerrado el puerto por riesgo de aludes durante varias jornadas, vecinos y profesionales insistieron de nuevo en la mejora de la carretera. Para los usuarios, además de acondicionar la vía, reclaman el mantenimiento del puerto con turnos durante la noche. «Desde las siete de la tarde a las ocho de la mañana no se acondiciona la carretera», denuncian.