Septiembre maquilla el verano turístico en Asturias
Asturias
Los datos del INE recogen una tendencia al alza después de dos meses sepultados por la lluvia. Más de la mitad de los empresarios reconoce que la temporada ha sido peor
01 Nov 2018. Actualizado a las 05:00 h.
Era un reto complicado de alcanzar. Después del récord absoluto de viajeros alcanzado en 2017, sostener esa curva al alza en 2018 era una aspiración complicada. Entran en juego una gran cantidad de factores y muchos de ellos incontrolables: del cartel de vuelos a las campañas de promoción o las condiciones meteorológicas. El resultado final de un verano partido por la mitad por el tiempo, con una primera parte anegada por las lluvias y una segunda marcada por el sol, ha cumplido solo parte de las expectativas. Septiembre ha sido el mejor de la serie histórica en turistas. Nunca ha habido tantos en Asturias es una recta final de la temporada alta. No obstante el sabor final de los empresarios es agridulce. Casi seis de cada diez aseguran que el negocio ha ido peor. Así lo han confesado en la encuesta realizada por Exceltur, la alianza por la calidad. Con este resultado en mente, además, no creen que lo que queda por delante vaya a ser mucho mejor. Nueve de cada diez calcula que va a cerrar el año con menos ingresos.
Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) del mes de septiembre son incontestables. La Dirección General de Turismo los utiliza, de hecho, para sacar pecho. «Asturias registra en septiembre la cifra más alta de turistas de la serie histórica para este mes, con un total de 271.195». Este es el resumen que realiza de la estadística. Tiene razones para hacerlo. La cifra de viajeros aumentó un 3,1% y las pernoctaciones, un 3,9%, con respecto al año récord de 2017.
Pero en el acumulado del año se centra en la parte más lustrosa, la del turismo extranjero. Lo hace justo en plena polémica por la cancelación de todas las conexiones internacionales desde el aeropuerto, que no solo impide marchar a los asturianos sino que obliga a los viajeros procedentes de otros países a realizar, como mínimo, otra escala. Ni París, ni Londres, ni Lisboa, ni Bruselas, ni tampoco Ginebra, Munich o Venecia. Algunos fueron destinos estables. Otros, puntuales o de temporada de verano. En el acumulado del año, es decir, entre los meses de enero y septiembre, recalaron en el Principado un total de 350.000 viajeros internacionales, que contrataron 736.926 noches de alojamientos en negocios colectivos. Hasta ahí las cifras globales. La comparativa, nuevamente con 2017, supone un incremento del 6,2% y del 4,3%, respectivamente para ambos parámetros.
¿Qué dice el director general de Turismo, Julio Zapico? Señala que el balance está cerca del 2017 y que trabaja para incrementar la promoción en los principales mercados de origen. Con esta labor pretende corregir el descenso anual, que se acerca al 2% en el número de viajeros y que es peor en las pernoctaciones: -3,2%. Es decir, vinieron menos y los que lo hicieron se quedaron menos tiempo.
La otra cara de la moneda es la de los empresarios. Esa es la que analiza Exceltur. Lo hace mediante encuestas directas con la patronal del turismo. Les pregunta sus perspectivas y también por su cuenta de resultados. Solo el 9% de los empresarios turísticos asturianos tuvieron mejores datos en este verano de 2018 que en el de 2017. El 34,6% reconoce que se movieron en datos muy similares. El 55,8% restante salieron perjudicados. La memoria de esta patronal señala al mal tiempo como uno de los elementos determinantes. En el norte, solo País Vasco cierra la campaña con un resultado «muy positivo». Del Principado y Cantabria, destaca que han tenido un buen mes de septiembre.
No obstante, no son nada optimistas de cara a la recta final del año. Nunca lo suelen ser en esta época del año. Salvo los puentes, el entorno del fin de año en los alojamientos rurales, el resto del trimestre suele registrar una actividad muy baja. Creen que será peor que la del año pasado. Más del 90% piensa que su volumen de negocio va a ser inferior. Solo en Extremadura y Cantabria tienen una percepción tan mala. En cambio, Madrid, País Vasco y Castilla y León son las tres regiones en las que la patronal espera mejores cifras. Son, de momento, sensaciones y expectativas basadas en las reservas. Habrá que esperar a las campanadas del 31 de diciembre para saber si se cumplen.