¿Qué es el virus del Nilo Occidental?
Asturias
El mosquito «Aedes japonicus» ha llegado a Siero y tiene la capacidad de transmitir este virus de origen africano
01 Aug 2018. Actualizado a las 17:27 h.
El Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias ha emitido el primer informe de Evaluación Rápida de Riesgo este mes de julio. En él se revela la aparición, por vez primera en España y sur de Europa, del mosquito «Aedes japonicus». La primera aparición de este insecto ha tenido lugar en Siero que, aparte de causar molestias con sus picaduras similares a las de los demás mosquitos, tiene la capacidad de transmitir varios virus entre los cuales el más relevante en España sería el del Nilo Occidental. Pero, ¿en qué consiste este germen y qué síntomas tiene?
El virus del Nilo Occidental fue descubierto en África en 1937 y llegó por primera vez a Estados Unidos, uno de los principales focos de acción en 1999. Este virus se transmite a través de la picadura de un mosquito portador, en este caso del «Aedes japonicus», y la probabilidad de contagio aumenta durante los meses más calurosos del año. La picadura de un mosquito infectado por el virus no supone siempre el contagio de esta enfermedad que incide levemente en niños con sistemas inmunitarios normales, llegando a producir únicamente una enfermedad gripal leve. En cambio, son los individuos mayores de 50 años con el sistema inmunitario debilitado debido al VIH, cáncer o trasplantes, los que se exponen a un mayor riesgo.
Los síntomas de este virus son similares al de la gripe: fiebre, dolores musculares, rigidez en cuello y espalda, fatiga, ganglios inflamados, dolores en las articulaciones o erupciones en la piel son los más comunes. En los casos más extremos, el Virus del Nilo Occidental puede llegar a provocar encefalitis, es decir, irritación e inflamación en el cerebro. No se transmite de una persona a otra ni es contagioso entre mascotas y humanos.
Este virus afecta principalmente a animales como aves o equinos, aunque a lo largo de los últimos años se ha extendido su contagio en seres humanos. No existe un tratamiento específico frente a la enfermedad, aunque sí se han comenzado a utilizar vacunas atenuadas en caballos. Las personas con infecciones leves del virus del Nilo Occidental se suelen recuperar por sí mismas. En casos de encefalitis o meningitis pueden ser necesarias terapias de apoyo. Sin embargo, aproximadamente el 10% de las personas con infecciones graves de WNV mueren.