Los tribunales anulan por segunda vez el nombramiento del director de silicosis

El juzgado de lo Contencioso Administrativo número 4 de Oviedo ha dictado un auto en el que obliga al Servicio de Salud (SESPA) a hacer efectiva la sentencia por la que anulaba el nombramiento de Luis Díaz López como director del Instituto Nacional de Silicosis. La sentencia, dictada el pasado mes de septiembre, señalaba que en el expediente administrativo tramitado no existía ninguna valoración o evaluación de los currículos de los siete candidatos presentados, de forma que el nombramiento era inmotivado. 

El SESPA pretendió dar por ejecutada la sentencia convalidando el nombramiento anulado, pero el auto dictado ahora advierte de que dicha medida resulta un indicio del intento de mantener a la persona previamente designada ya que la comisión de valoración propuso al mismo candidato reinterpretando las bases y adaptándolas a su perfil. Así, la nueva resolución judicial obliga al SESPA a hacer efectiva la primera anulación del nombramiento, a ordenar a la Comisión de valoración que establezca un baremación objetiva de méritos y a elevar una nueva propuesta de nombramiento del candidato que obtenga mayor puntuación.

Según el Conceyu por otra Función Pública n'Asturies, que solicitó la ejecución de la sentencia, «en cualquier país democrático un escándalo de esta magnitud obligaría a dimitir de forma fulminante a los responsables políticos del mismo y aquí serán convenientemente protegidos y recompensados».

En abril de 2017 la Consejería de Sanidad acordó el nombramiento del ingeniero de Minas por la Universidad de Oviedo Luis Díaz López como nuevo gerente de Silicosis, un cargo vacante desde el proceso de traslado de las instalaciones del Instituto a unos terrenos anexos al nuevo Hospital Central Universitario de Asturias (HUCA). Previamente, el Gobierno había aprobado desgajar Silicosis del HUCA para aumentar la autonomía funcional de un centro de referencia nacional para enfermedades respiratorias de origen laboral, un cambio que venía siendo reclamado por IU desde la firma del acuerdo de investidura con el PSOE. Así, Silicosis dejó de estar vinculado a la gerencia del área sanitaria IV para pasar a depender directamente de la dirección del Servicio de Salud (SESPA) y aumentar así su autonomía funcional y que pasara a tener su propio presupuesto de ingresos y gastos y llevara a cabo un rediseño de sus departamentos