El Principado previene la ludopatía en menores
Asturias
El Gobierno presenta un protocolo para evitar el acceso a casinos, bingos, locales de apuestas y salones de juego
05 Mar 2018. Actualizado a las 14:26 h.
El Gobierno del Principado de Asturias ha presentado El protocolo de menores en materia de juego y apuestas, una iniciativa que busca reforzar las medidas para evitar el acceso de los menores al juego y las apuestas en establecimientos hosteleros, casinos, bingos, locales de apuestas y salones de juego. La iniciativa, pionera en España, pretende ir «un paso más allá» en materia de prevención de las conductas adictivas y ofrecer una respuesta coordinada entre los colectivos implicados, según ha indicado el consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, durante la presentación del protocolo.
Este protocolo busca luchar contra el acceso al juego por parte de los menores de edad y está incluido en el plan de prevención de la ludopatía que el Gobierno asturiano está elaborando. A través de la difusión de una guía que se distribuirá por los diferentes establecimientos, sus objetivos pasan por recoger de manera ordenada y sistemática las actuaciones para la prevención del juego en menores de edad; orientar y coordinar el trabajo de empresas operadoras, policías locales y el Grupo de Inspección del Juego del Principado. Busca también implicar a sectores sociales e institucionales en la intervención con menores de 18 años, dar visibilidad al problema, sensibilizar a la población y fijar criterios comunes de intervención para evitar estas conductas adictivas.
El consejero de Presidencia ha explicado que en Asturias hay presencia de máquinas recreativas en más de 5.000 locales de hostelería, hay un casino con dos salas, cuatro bingos, locales de apuestas y salones de juego. Se trata, por tanto, de «un sector importante en Asturias que además está comprometido con la lucha contra la ludopatía». «Es un programa integral que atiende a los menores en el horario escolar, en sus circunstancias familiares y que hace hincapié en el plan de la Unidad adscrita en materia de juego», según ha explicado. El protocolo formará parte también del diagnóstico que se está elaborando con motivo del plan de ludopatía. Todas las medidas, ha explicado, van dirigidas «a imposibilitar por todos los medios que el menor tenga acceso al juego presencial». En cuanto al juego por internet y redes sociales, este protocolo no tiene competencia, aunque «también se está actuando» sobre ello.
Preguntado sobre las cifras del juego en Asturias, Martínez ha subrayado que no existen estadísticas que reflejen cuántos menores juegan, ya que es una práctica prohibida. «Sí podemos saber algunos comportamientos pero cualitativos», ha reconocido.
Grupo de inspección
El protocolo muestra a los propietarios de los establecimientos cómo deben actuar si tienen la sospecha de que hay un menor jugando. En todos los casos, si el menor se muestra reticente a decir su edad o mostrar su Documento Nacional de Identidad, los propietarios de los establecimientos deberán recurrir a la Policía Local, y en última instancia al Grupo de Inspección del Juego, que lleva 12 años operativo en Asturias. Este grupo consta de cinco agentes de la Policía Nacional adscritos al Principado de Asturias, que son los encargados de vigilar el cumplimiento de la normativa en materia de juego y apuestas. Para reforzar su labor el Gobierno asturiano ultima un plan inspector que aborda la realidad actual del sector. A día de hoy esta unidad no ha abierto ningún expediente por presencia de menores en establecimientos, aunque eso no implica que no se hayan producido casos.
El protocolo contempla que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad en materia de menores y juego puedan actuar de oficio. Cuando se detecte la presencia de una persona menor de edad en un establecimiento de juego o en un local de hostelería jugando, se remitirá al Grupo de Inspección un documento instruido para abrir un expediente sancionador. La intervención de oficio se basará en visitas periódicas y regulares, y se aumentarán las visitas esporádicas en lugares que previamente se pueda deducir que los menores intentan acceder. Por último esta iniciativa tiene en cuenta que, si se detecta una situación de riesgo o desamparo de la persona menor de edad se actuará de acuerdo con la normativa vigente y protocolos correspondientes aplicables.