El menguado retorno del salmón asturiano
Asturias
La ASF (Atlantic Salmon Federation) señala en su último informe la necesidad de extender las políticas conservacionistas en los ríos cantábricos
19 Aug 2016. Actualizado a las 08:40 h.
La Atlantic Salmon Federation (ASF), una de las grandes asociaciones internacionales dedicadas a la protección y conservación del salmón atlántico salvaje, ha publicado recientemente el último informe de seguimiento de los retornos y capturas de salmones en Europa, que incluye los datos de los ríos asturianos y gallegos. El informe destaca la necesidad de extender las políticas conservacionistas en los cauces de la cornisa cantábrica, los más meridionales de Europa, y menciona las dificultades que atraviesan en los últimos años.
Para valorar el retorno de los salmones en Asturias y Galicia, ante la escasez de contadores y a la espera de si la administración asturiana decide realizar los recuentos a ojo, la ASF se guía por el balance de capturas a lo largo de la temporada 2016. En Asturias fueron 1.120 los salmones precintados, cifra que se sitúa en la media de los últimos cinco años. En Galicia se sumaron un total de 173 salmones, también en la media de las últimas temporadas. En ambos casos, las cifras de capturas están muy alejadas de las que reflejan a mitad de campaña ríos de países con amplia tradición salmonera en Europa. En la mayoría de los ríos europeos el balance de entradas y capturas es provisional, pues la temporada se prolonga hasta los meses de octubre o noviembre y durante los meses de otoño la entrada de peces continúa regularmente.
El informe de la ASF señala que, en general, los retornos de salmones están siendo muy satisfactorios en muchos de los ríos europeos, y destaca los resultados de los ríos islandeses, noruegos, irlandeses y escoceses. Orri Vigfusson, presidente de NASF, otra de las grandes asociaciones internacionales, resalta la extraordinaria campaña que se está viviendo en Islandia, con el mejor inicio de temporada desde 1980. Más de 60.000 ejemplares fueron capturados en los ríos islandeses en el año 2015.
En Noruega, Per Aleksander Arneberg, presidente de la Asociación de Pescadores de Mosca, hace referencia al comienzo de la temporada en el río Gaula, en el que destaca el tamaño de los ejemplares de entrada, con muchos peces entre los 10 y los 16 kgs. Señala Aleksander que, tras una catastrófica temporada en el 2012 que desató las alarmas en este río, se modificó la legislación de la pesca deportiva, estableciendo políticas de promoción de la pesca con captura y suelta y de cupos sostenibles por pescador. Los informes científicos encargados por el gobierno al Instituto Noruego de Estudios Naturales sobre el Alta River, otro de los grandes ríos salmoneros noruegos, indican que se están alcanzando el 100% de los objetivos de desove y que ya se ha superado la entrada del número de salmones establecido como necesario para el mantenimiento de una población saneada. El freno a la pesca comercial y el control de la producción de salmones de granja, problemática común a otros países del Atlántico norte, son preocupaciones adicionales de los aficionados noruegos.
Desde Dinamarca, Jen Sönnichsen, presidente de la Federación de Pescadores de Mosca, confirma en el documento de la ASF la mejoría de la pesca en los ríos daneses en las últimas temporadas, gracias a los esfuerzos que se está realizando en el control de los stocks de salmones salvajes y en la mejora del hábitat. La temporada en Dinamarca comienza el 16 de abril y se extiende hasta el 15 de octubre. Todos los ríos tienen establecida una cuota máxima de pesca con muerte pero, además, según afirma Sönnichsen, aumenta el número de aficionados que practican la captura y suelta: en el río Skjern, de un total de 627 salmones capturados hasta el momento, fueron devueltos con vida al agua un 68%; en la misma proporción se encuentra el río Storä, en el que han sido devueltos 578 ejemplares de los 823 capturados en el transcurso de la actual temporada.
También desde Irlanda se informa de un importante incremento de los retornos de salmones de primavera y grilses (salmones con un año de mar) en esta primera parte de la campaña. Noel Carr informa que el río Moy sigue siendo el más prolífico y en algunas zonas como Swinford, Foxford o Ballina las entradas se han incrementado un 50% respecto a la temporada 2015. Asimismo, en los ríos vedados temporalmente a la pesca y en aquellos en que se permite únicamente la captura y suelta, se están detectando importantes retornos que deberían asegurar las poblaciones y la pesca cuando se reabran en las próximas temporadas. Shane Gallagher informa que en el Drowes, un río pequeño que parte del lago Melvin, la entrada de salmones de primavera y recientemente de añales ha sido la más importante de los últimos años, pese a las grandes riadas que a principio de la campaña anegaron muchas de las zonas de pesca, que permanecieron cerradas.
Los datos de los ríos escoceses son igualmente positivos. En el Spey ya se han capturado 3.940 salmones, de los que se han devuelto el 94%, y las capturas del 2016 superan hasta el momento en un 38% a las realizadas en el 2015. El Tweed o el Tay se mantienen en sus niveles habituales de capturas, a la espera de la entrada de los salmones de otoño, la principal estación de retornos en estos dos cauces. Precisamente los ríos Spey, Tay y Tweed son algunas de las más importantes cuencas en las que el gobierno escocés ha adoptado medidas restrictivas para la pesca deportiva, tales como la prohibición de utilizar quisquillas y gambas como cebo, el establecimiento de períodos de captura y suelta obligatorios, o distintas limitaciones a la pesca con muerte en función de si son salmones frescos, del peso y del sexo de los ejemplares capturados. También en el río Dee las entradas son mucho mejores que en el 2015, a pesar de un complicado inicio de año a causa de las grandes riadas invernales.
Finalmente, en Suecia, Lubbe Ferysson anota que el contador del río Torne ha detectado hasta el 8 de agosto el paso de 98.070 salmones, frente a los 50.000 contabilizados en el 2015 hasta la misma fecha. Ya en Finlandia, en el río Simojoki, en el Báltico Norte, los retornos duplican también en cantidad a los del 2015.
Del informe presentado por la ASF se desprende la creciente relevancia que se concede en los países europeos con ríos salmoneros a la medición de los retornos y al seguimiento y control del desove y los stoks, así como al establecimiento de medidas cada vez más proteccionistas de la especie, que se concretan en regulaciones más restrictivas de la pesca comercial en los estuarios y de la deportiva en los ríos. Y se constata el progresivo arraigo de la cultura de captura y suelta entre muchos de los colectivos de pescadores deportivos.