Lucía Etxebarría vive en Gijón «uno de los momentos más desagradables de mi vida»

Lucía Etxebarría no está pasando en Gijón sus vacaciones soñadas. Lo que comenzaron siendo quejas por lo que considera precios abusivos en la región (un taxi del aeropuerto a Gijón por 53 euros y 3 euros por un agua) ha pasado a ser una denuncia pública por lo que ha catalogado como «uno de los momentos más desagradables de mi vida». Según detalla en un hilo en Twitter, la escritora se ha sentido «acosada» -junto a su hija de 14 años y a tres amigas- por un grupo de jóvenes «borrachos» mientras comían en un restaurante.

La escritora explica que en una de las mesas del restaurante había un grupo de unas 20 personas «borrachos, gritando a berrido limpio y siendo desagradables no, lo siguiente,con la camarera». La escritora prosigue su relato. «En un momento dado hemos sacado un sonómetro ( una amiga es arquitecta). Estábamos a 87 decibelios. A partir de 85 las camareras habrían debido llevar tapones para los oídos, según legislación vigente. El ambiente era insoportable. Finalmente se lo hacemos notar a la camarera muy amablemente. Ella, a su vez muy amablemente, se dirige a la mesa de 20 y tantos borrachos a pedirles que bajen el tono».

La intervención de la camarera no gustó al grupo de jóvenes que, en palabras de la escritora, comenzó a insultarla a ella y su amigas. Según añade, entre los 25 gritos se escucha algún «puta», empiezan los abucheos y su hija incluso acaba llorando.

La situación se pone cada vez más tensa y las amigas deciden levantarse y recriminar la actitud del grupo de jóvenes, ante lo que estos les contestan que «si no te gusta #Gijon, no vengas». Etxebarría califica lo que vivió de «matonismo en estado puro». «Lo peor de todo» es que nadie movió un dedo para ayudarla, sentencia.