A esto destinará Bayer los 4,5 millones que invertirá en la factoría de Langreo
Actualidad
La multinacional apuesta por seguir modernizando las instalaciones de la planta que tiene en La Felguera tras facturar 842 millones en la región Iberia y consolidar su crecimiento tanto en España como en Portugal
15 Mar 2018. Actualizado a las 18:18 h.
Bayer ha querido culminar los actos de conmemoración del 75 aniversario de la planta que la factoría tiene en La Felguera (Langreo) por todo lo alto. Además de firmar un acuerdo de colaboración con el Museo de la Minería y de la Industria (MUMI) e inaugurar un nuevo edificio de oficinas «sostenible y eficiente» que será de referencia en la región Iberia, la multinacional reforzará su compromiso con el territorio con una nueva inversión de 4,5 millones durante este año 2018. El anuncio lo realizaba el consejero delegado de Bayer en España y Portugal, Rainer Krause, quien ha dicho que las inversiones tanto en investigación y desarrollo como en infraestructuras son necesarias «para hacer frente a los retos de futuro» y para seguir cumpliendo «los altos estándares de calidad y excelencia», lo cual, ha apostillado, conlleva «una gran responsabilidad». Pero, ¿en qué se gastará concretamente esa cantidad de dinero? Y es que hay que tener en cuenta que la multinacional ya realizó otra inversión de cuatro millones de euros en 2017.
El director de la planta de Bayer de La Felguera, Jorge Álvarez, explicaba al finalizar el acto de inauguración del nuevo edificio que la nueva inversión será en menor medida para continuar con la adecuación de las instalaciones de la factoría langreana y en mayor cuantía para la mejora de los procesos de producción. Según ha especificado, casi 600.000 euros se destinarán a renovar uno de los edificios antiguos «haciendo la primera planta más diáfana para que pueda acoger reuniones de hasta cien personas y para adecuar un pequeño comedor» para los trabajadores. Los otros casi cuatro millones de euros servirán para ejecutar «10 proyectos pequeños», todos ellos en el ámbito de mejorar los procesos de producción. Álvarez ha puesto de relieve dos de esos proyectos por considerarlos de singular importancia: por un lado, en las instalaciones destinadas a la fabricación del compuesto base de la aspirina, el acido acetilsalicílico, se cambiará el sistema de envasado final del compuesto para que en menos lotes vaya más cantidad; y, por otro, se actuará en las instalaciones en las que se trabajan las líneas de productos para la salud humana y para la salud animal para que ambas líneas queden separadas totalmente, además de habilitarse una sala donde se centralizará el control de los productos.
Esta nueva inversión de 4,5 millones para este año viene a reforzar la realizada en 2017, que ascendió a otros cuatro millones de euros. Justamente un millón se destinó a la construcción del edificio que se ha inaugurado en la mañana de este jueves, un edificio que convierte nuevamente a la planta de Bayer de La Felguera en un centro de referencia para la multinacional puesto que, según ha destacado el director de la misma, son el primer centro de producción de la región Iberia que apuesta «por la funcionalidad y el trabajo en espacios abiertos», lo cual confía que se traducirá «en una mejora de nuestras dinámicas de trabajo a través de espacios más colaborativos, que favorecen la interacción y el trabajo en equipo».
De hecho, el edificio se ha construido para que sea «sostenible y eficiente» mediante el uso de elementos prefabricados que, además de reducir al máximo el tiempo de construcción (apenas ocho meses) han dado un alto nivel de acabados y calidades. Las instalaciones han sido diseñadas para ser lo más eficientes posible, de forma que el edificio tiene garantizada una clasificación energética A+. Además, el interior, en el que trabajarán 25 personas, cuenta con tecnología domótica puntera.
Por su parte, el consejero delegado de Bayer en España y Portugal y responsable de la división Pharmaceuticals en la región Iberia, Rainer Krause, fue el encargado de presentar el balance de resultados de la zona que representa. Según ha dicho esta mañana en La Felguera, Bayer facturó 842 millones de euros a los clientes de España y Portugal en el año 2017, lo que supone un crecimiento del 2,3% respecto al año anterior. Krause ha concretado que la facturación a los clientes españoles alcanzó lo 678 millones de euros, mientras que a los portugueses se les facturaron 163 millones, un 1,7% y un 4,6% más que en 2016 respectivamente. Así, el consejero delegado de Bayer en la región Iberia ha considerado que «estos datos suponen una senda de crecimiento sostenido que confirma la recuperación del sector en términos generales y preparan a la organización para afrontar retos del presente y del futuro». Uno de los mencionados por Rainer Krause es la planificada adquisición de Monsanto para reforzar el área de agricultura de la multinacional, denominado Crop Science, adquisición que por lo que ha avanzado se culminará en el segundo trimestre de este 2018 en tanto que ha dicho que ya cuenta con la aprobación de la mitad de las autoridades que tienen que dar luz verde «para concluir la adquisición y empezar el proceso de integración».
El máximo responsable de Bayer en la región Iberia ofrecía estos datos en el nuevo edificio que se ha construido en La Felguera después de la inauguración de éste en un acto que contó con numerosos invitados, además de los trabajadores de la propia planta y, por supuesto, con representación institucional tanto del Principado y del Ayuntamiento. Si por parte del Gobierno regional acudió el consejero de Industria, Isaac Pola, por parte de la administración local lo hizo el alcalde de Langreo, Jesús Álvarez, quien parece que no se sintió cómodo durante el acto y decidió marcharse de las instalaciones de la Bayer en su bicicleta antes incluso de conocer el interior del nuevo edificio.
El primer momento violento para el regidor langreano fue cuando se dispuso a salir tras la intervención del consejero de Empleo para leer su discurso y fue abordado por el director de la planta de Bayer de La Felguera, Jorge Álvarez, puesto que en el guión de intervenciones no estaba prevista la de Jesús Sánchez, aunque finalmente accedió al atril para destacar la apuesta y el compromiso de Bayer con el territorio. «Langreo y Asturias necesitan de muchas Bayer para salir de la situación en la que se encuentran», manifestó el alcalde de Langreo. El segundo «feo» por el que pasó Jesús Sánchez fue ver como recibían tijeras el consejero delegado de Bayer en España y Portugal, el director de la planta de La Felguera, y el consejero de Industria para protagonizar el corte de la cinta roja con el que se simbolizó la inauguración del nuevo edificio mientras él se quedaba un paso atrás advirtiendo que parecía que no estaba previsto que él estuviera allí. Acto seguido Jesús Sánchez se dirigió hacia donde había dejado aparcada su bicicleta, quitó el candado, se puso el casco y abandonó las instalaciones langreanas de Bayer.